viernes, 29 de julio de 2011

Hasta la peineta y más allá

Pues eso, que estoy hasta la peineta de tanta tecnología y tanto ordenador. Que sí, que sí, que  ya sé que es una maravilla Internet, que nos podemos comunicar en nada con nuestros amigos y familiares, hablar a la China sin pagar un duro, o ver en vivo y en directo cómo tu sobrina recién nacida te saluda, una maravilla. Lo que más me gusta es cuando estás hablando por Skype con tu novio y no paras de recibir frases y llamadas entrantes de tus contactos recién conectados, tan íntimo, verdad?  Y cuando estás en la ducha, ese momento tan tuyo y te suena el móvil sin para porque María cambió su foto de perfil, o Andrés comentó tu enlace, Pepe te mandó un mail o tu amiga Silvia te llama sin parar, sin parar, que sales con la cabeza medio enjabonada, histérica de tanto cling-cling-cling y preocupara porque Silvia te llama y te llama pensando que le pasó algo para que cuando le marcas mientras se te mete champú en los ojos te diga que quiere que veas en la tele tíaaaa un reportaje de donde ella acaba de pasar las vacacionessssss. Me encanta.
Que sí, que para muchas cosas Internet está muy bien, pero hay veces que agobia y dan ganas de tirar el ordenador, el móvil y la impresora por la ventana!
Mi amiga Laura me dice que no me entiende, a ella le encanta estar todo el día conectada y buscar lo que se le antoje cuando le apetezca pero para mí, eso es un poco demasiado. A ver, que es verdad que puedes encontrar de todo en Internet, siempre y cuando sepas cómo buscar, o más bien, cómo decirle al señor Googole lo que quieres. El otro día dejé por misión imposible la búsqueda de trabajo como azafata o asistente personal. Yo me refería a azafata de esas de aviones y hasta que caí de la burra de que debía poner “auxiliar de vuelo” o “tripulación de cabina” encontraba todo tipo de proposiciones de mandar mi currículum adjunto foto de cuerpo entero más medidas “pechuguiles”  y ni qué decir que el anunciante del puesto laboral sonaba a cuidadín cuidadín porque que un tal Jose bien parecido y cariñoso te diga que no es una oferta de trabajo indecente… soy sólo yo o cuando un hombre cariñoso me dice que su proposición no es indecente a mí a lo que me suena es a MUY IN-decente?!?! Y bueno, ya dejémos por imposible buscar ser asistente personal poque cuando trás ver varias ofertas donde entre tus labores de agenda, organización de reuniones, entra dar masajes, o acompañar a cenas al solicitante de empleo va a ser que no se refieren al mismo tipo de asistencia que yo!!!
Admito que me encanta lo de internet, y poder estar tan en contacto con tanta gente de sitios diferentes y lejanos, pero hay días en lo que sientes que tu vida sería un poco más tranquila, quizás también pelín más sosa, pero sobre todo más tranquila sin tanta necesidad de tecnología!

lunes, 18 de julio de 2011

Un monton de recuerdos‏.


Franccesca nos expresó su cóctel particular: disco, música y maromo de color, aunque no nos dejó clara su preferencia (garoto de Ipanema, mulato caribeño ó negro que se precie del África más profunda)…
Esta anécdota me hizo recordar a Shirley.
Nos presentó en la discoteca una amiga común y al poco de pasar la medianoche, yo ya estaba totalmente enamorado.
La extrema feminidad y sensualidad de esta mujer y su manera de moverse con cualquier ritmo, me hicieron caer rendido a sus pies.
Shirley era aprendiz de modelo, y no perdía ocasión de demostrar sus dotes a todo el que le rodeaba. Nuestras salidas resultaban un continuo modelaje y daba igual el destino de ocio elegido (cine, discoteca, restaurante, paseo por zona de shoppings, etc.).

Su actitud, que al principio me gustaba y congratulaba, después me empezó a resultar incómoda… Mi necesidad de pasar desapercibido en cualquier sitio público o quizás, simples celos de una mujer siempre observada y deseada.

Después de salir unas semanas, me propuso intercambiarnos unas fotos para sentirnos más cerca aunque estuviésemos separados. Cuando yo todavía no me había hecho la foto tipo carné, Shirley apareció con un primer plano de su rostro tamaño medio folio.
- Pero mi amor, con este tamaño ¿dónde quieres que te lleve?...

Cuando Francesca me contaba sus aventuras discotequeras, mientras jugaba y se acomodaba el pelo con esa gracia que le caracteriza, no pude evitar que se me removieran un montón de recuerdos…

Mario

miércoles, 6 de julio de 2011

Bailar o no bailar...

Discoteca de RnB, Will Smith sonando de fondo, la pista dándolo todo, yo con mis amigas moviendo el body cual profesionales rodeadas de negrazos cachas que bailan que te derrites. Bailas y bailas y esperas a ver cuál de los maromazos de chocolate vendrá a hacerte compañía y os echáis un par de bailes juntos.
Hay que aclarar que cuando los negritos que se menean a la perfección se te acercan para bailar contigo lo hacen por la espalda y se te pegan un poco al lateral de tu pierna para que puedas acoplarte y lo paséis genial meneándoos al ritmo de Snoop Dogg. Son muy sutiles, muy masculinos y delicados, nunca se te pegan como lapas, nunca sientes nada que no se suponga que debes sentir en mitad de la pista, sólo se te acoplan, te agarran suavemente la cintura o las manos, y a bailar. Nunca te interrumpen la canción que suena con conversación tonta para ver si te sacan quién eres, ni te invitan en medio de la canción a tomar algo, saben que la música y el baile son lo más importante y nunca se les ocurre estropearte el ritmo ni la diversión. Saben cómo se hace.
Ahí estoy yo, en medio de la oscuridad, bailando y deseando estar acompañada. De pronto siento que alguien se me acerca por la espalda oh si gracias Universo y siento que me da un empujón de cuidado y pienso, bueno, habrá resbalado… Sigo bailando oh yeah sin haberle visto la cara a mi pareja y de pronto mi espacio vital que ya está bastante limitado en ese momento pasa a ser inexistente y empiezo a tener idea de la anatomía del bailarín que la verdad de todo menos experto del RnB … vamos a ver con qué estoy bailando? Mmmm no hay músculos… mmmm bajito, no?... mmmm madre como me agarre la cintura con más fuerza me voy a quedar sin aire …mmmm que raro no pilla mi ritmo… vamos a ver si pillo yo el suyo…pero qué ritmo lleva?? En medio de todas estas conjeturas por saber con qué maromazo estaba bailando, en medio de la super canción que sonaba me suelta un “Hey nena, cómo te llamas?” y es en ese momento cuando oigo una voz muy poco varonil para ser de un negro y a continuación me dice “Quieres tomar algo?” Bueno, esto pasaba ya de la raya, no sólo no tiene ritmo, no tiene músculos, me lleva empujando un rato y encima me estropea la canción a medias?!?!?! Tengo que ver quién es este!!! Me doy la vuelta y que veo: retaco blanco vestido de rapero XXL, escuálido, con amago de actitud de negro intentando ligarse a la de turno con técnica RnB pero aplicadas por mente chumba chumba que funciona en otros bares pero no en este!!!!!! OOoooohhhhhh de todas las que hay me toca a miiiiiiii, por quéeeee ooohh Diosssss….. Plan de Emergencia!! Plan de Emergenciaaaa!!!!!
Es entonces cuando te sacas el as de la guiri que no se entera de español y empiezo a hablarle en alemán que seguro que no sabe… y el tío con cara de QUE? Y yo “achten suchten sonden laden…” y el otro que ve que no hay tu tía, que no va a poder meter ficha con la guiri y se va alejando con su ritmo serrano y yo que empiezo a ver la luz al final del túnel y vuelvo a disfrutar de la música pero eso sí, la próxima, en cuanto sienta que tengo acompañante, me giro para comprobar que no me hayan dado helado de nata por helado de chocolate que es el que a mí me gusta cuando bailo!

F.

domingo, 3 de julio de 2011

Una duda razonable

El café de esta mañana con Franccesca fue de todo menos amistoso.
Mi incredulidad tocó techo cuando me soltó toda su teoría sobre los hombres que leemos alguna columna o artículo de los que salen en las “interviús” de turno.
¿Por qué nos juzgan las mujeres de manera tan simple?
¿Seremos de verdad tan básicos?


Después de quedar arrinconado contra la barra escuchando las parrafadas de Franccesca, decidí pasar al ataque.
Vamos a ver, ¿cuál es vuestro problema?, ¿os decimos algo si os pasáis el tiempo visionando revistas de trapitos o de cotilleos?, ¿no os gustan que las mujeres muestren tan abiertamente sus encantos?, ¿son incompatibles los artículos de opinión  con un buen culo o un par de tetas?, ¿no os parece adecuado que se muestre la evolución de las descendientes de Eva?

Esta semana una mexicana despampanante muestra sus encantos bajo el título de “lo que se perdió Iker”…
Ojalá que los columnistas de turno agudicen la pluma en sus artículos de opinión sobre cualquier tema de interés social y, porque no, cultural. De esta manera crearían en el público femenino una duda razonable sobre interés de estas revistas ¿no les parece?

M.